«¿Nada se gana, entonces, con buscar la verdad? Se gana por lo pronto el rescate de la propia dignidad, que es ya bastante; y se cumple con el Maestro -Unamuno- quien dijo que «la más miserable de todas las miserias, la más repugnante y apestosa argucia de la cobardía es esa de decir que nada se adelanta con denunciar al ladrón y al majadero». FRANCISCO IGARTUA ROVIRA – 23/09/1923 24/03/2004
Para poner luz en este debate histórico, nada mejor que aportar nuevos datos de fuentes hasta ahora nunca utilizadas. La apertura, tanto del Archivo Secreto del Vaticano como el Archivo del Antiguo Santo Oficio permite en la actualidad consultar toda la documentación referente a Ezkioga, y seguir al detalle las vicisitudes de la doble condena –diocesana y romana- de Ezkioga. Ofrece también la posibilidad de controlar y completar muchas de las afirmaciones de William Christian Jr. en su exhaustiva obra sobre las Apariciones de Ezkioga, pero excluyendo los testimonios de los que fueron los protagonistas primeros.
ResponderEliminar